Quiero expresar ante todo mi más profundo respeto hacia la profesión periodística en general y mi veneración hacia determinados periodistas en particular que han llegado al mayor sacrificio imaginable, como es la de dar su vida por defender sus ideas, o para defender colectivos marginados. Sin embargo, como en cualquier profesión hay algunos que dejan mucho que desear y me refiero a quien escribió hace dos días el artículo referido a ENCE “Fuera ¡ya!”, no solo lo critico por su estilo panfletario de pura demagogia y faltando a la verdad, sino porque escribe al dictado de otros, es comparable a los mercenarios que ponen sus armas al servicio de quien más pague sin importarles el daño que puedan hacer. En este caso ni siquiera puede hablar de sus armas, porque deben de ser alquiladas, o de segunda mano, ya que este artículo es un corta-pega del que firmó el año pasado por estas fechas utilizando las mismas palabras y las mismas frases que el presidente de la APDR.
Voy a refrescarle la memoria, de paso que desmonto alguna de las barbaridades que escribe, comenta que celulosas es sinónimo de pobreza. Desde hace más de cien años los países escandinavos junto con canadienses y norteamericanos apostaron por estas industrias y allí siguen creando riqueza y trabajo, siendo de las naciones más avanzadas del mundo y eso que siguen blanqueando con dióxido de cloro, técnica ya obsoleta aquí, pues se blanquea solo con oxígeno gracias a un sistema más avanzado y respetuoso con el medio ambiente desarrollado por ENCE.
De los eucaliptos tengo que comentar que el norte de Galicia cuida estos bosques como oro en paño y no arden porque los cuidan, entre los propietarios hay algún constructor, que invirtieron en estas plantaciones al ver que el ciclo del ladrillo se acababa. Si se planta eucaliptos es porque sigue siendo rentable y quien quiera plantar especies caducifolias lo puede hacer, hay millones de Has., disponibles en Galicia, si todos aquellos que alegremente abogan por estas plantaciones lo hicieran realmente, habría más castaños y carballos que pinos y eucaliptos, pero una cosa es predicar y otra plantar. Cuantos licenciados demagogos como Ud., que ahora despotrican contra el eucalipto, deben sus estudios a que sus padres pagaron sus carreras con lo producido por estos árboles.
Sobre la desertización y el agua que consumen no voy a decir más que lo que reputados científicos han dicho y es que el consumo de agua no es mayor que en otras especies, demostrándolo con estudios serios y concienzudos, le sugiero entre otros para que se ilustre, el libro publicado por la doctora Rosa Calvo de Anta, del Departamento de Edafología y Química Agrícola de la Universidad de Santiago de Compostela.
Si como dice Ud., desapareciera ENCE de Galicia, seríamos mucho más pobres y los eucaliptos se seguirían plantando igualmente para alimentar las fábricas de nuestros vecinos asturianos y portugueses, dejando allá el valor añadido.
Y para acabar de nada serviría unir Pontevedra con Marín, pues lo único que harían, sería cementar la costa como en Levante con edificios -si es que alguien los compra-, pues para que haya ciudades vivas, necesitamos industrias que creen empleos y el puerto de Marín, se reduciría a su mínima expresión, al perder el movimiento portuario que ENCE supone.
Pontevedra, 11 de mayo de 2012.
Antonio Ligero Santana
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